La Existencia se expresa en diversas formas, en todas las formas posibles se expresa y todas ellas son necesarias y válidas en cuanto expresión de la Existencia. El Todo es más que la suma de las partes...o de Todo hay en la viña del señor, que viene a decir lo mismo.
Los baremos de normalidad no contemplan esto, tampoco lo contemplan los deseos de perfección. Criterios de inteligencia, de belleza, de lo que sea...fragmentan la realidad no fragmentada per se y dividen el mundo entre quienes sufren por no alcanzar la media y quienes se sonríen con orgullo, externa o internamente, por superarla. Pero el ansia por esforzarnos en cumplir la siguiente marca y lograr un nuevo record o al menos conseguir un resultado que nos permita participar del grupo de l@s elegid@s, no cesará. Solo ver la belleza igual de la expresión de la Existencia en cada flor del prado y saber que el juzgar una más bella que otra, o una planta más luminosa que otra es fruto de nuestra ignorancia metafísica, de nuestra miopía humana que no alcanza a ver la Totalidad cuando se ofusca en mirar solo una parte, es lo que nos llevará al sosiego.
